Sin embargo, existe una categoría muy reducida de personas que carecen del más elemental perfil de riesgo, ni siquiera se les puede calificar como proclives al riesgo. Éste es el caso de nuestro Gobierno de coalición en España, nacido de una precariedad original como es gobernar con el menor número de escaños de apoyo directo y los más heterogéneos de la Democracia. Con un sólo principio fundamental que es el de la supervivencia, desde su toma de posesión se ha empeñado en experimentar todas y cada una de las combinaciones parlamentarias existentes con tal de sobrevivir unos meses más, sin reparar en el enorme coste que a futuro tienen la gran mayoría de las decisiones que toman.