Los jóvenes del presente ya no se informan por los periódicos tradicionales, la radio o la televisión. Quizás mediante Instragram, Twitter, algunos youtubers o series puedan rellenar algo sus vacíos en historia o temas de actualidad, pero… Paralelamente a esto, y quizás, a mi juicio, la más potente, es esa facultad informal que tienen las personas sin criterio de cazar al vuelo informaciones importantes para formarse uno. Un titular, un tuit, en ese segundito que miras la televisión en un bar, alguna fotografía, el comentario aparentemente distraído de un profesor o de un amigo mayor o de un familiar en una comida, esas risas tras un comentario político; frases sin precisión ni tiempos, en las que se mezclan argumentaciones falsas, asimetrías, relativismo simpático. Bullshit, en definitiva.