En este sentido, la apuesta política de los socialdemócratas es la de crear contrapesos entre verdes y liberales con un «árbitro» en medio que es el SPD con siete ministerios, algunos de ellos vacíos de contenido por tener competencias transferidas a los lander. Los cinco ministros que tendrá Die Grüne (especialmente la cartera de Economía y Cambio Climático) irremediablemente tendrán que acomodar sus tesis a lo que es posible y deseable en términos de política económica, la cual estará concentrada en los cuatro ministerios del FDP. Siendo cierto que se ha producido un cambio sociológico notable en el votante alemán de clase media-alta, el cual ahora está más preocupado por el cambio climático o por la calidad de los hábitos de vida, no deja de estar inquieto por la inflación, las presiones sobre los salarios o el cambio del modelo productivo.