Mientras tanto, los del partido que hoy consuma la vicepresidencia y varios ministerios andaban paciendo (y cobrando) en algunos de los países de la Alianza Bolivariana por los Países de Nuestra América (ALBA) en los que esas exigencias, además de no existir, eran bastante poco populares. Imagínense: Cuba, Venezuela, la Bolivia de Evo Morales o el Ecuador de Rafael Correa.