Y es que si el PSC da el paso y el centro y centro derecha también consigue pacificar esta cuestión, Cataluña, todos los catalanes, tenemos un futuro que no sea la decadencia y la confrontación permanente y exacerbada. Cataluña no puede recobrar su esplendor si no supera la confrontación identitaria. Los nacionalismo, unos y otros, son incompatibles con una sociedad plural porque la divide y debilita. Y los catalanes, al igual que convivimos en la diversidad a nivel familiar , social y profesional , hemos de poder hacer lo a nivel político.