Peyu y Jair Domínguez son dos de estos personajes, generosamente bien pagados con los impuestos de todos los españoles, que usan el “puta España” no solo en sus redes sociales, sino también en los diversos programas de radio y televisión – públicas – en los que colaboran. Son dos personajes que se hacen pasar por “transgresores” y “sin pelos en la lengua”, cuando no hacen más que desarrollar el viejo humor supremacista de toda la vida, el de reírse del que consideran “diferente”, buscando su humillación. Andaluces y gitanos han sido algunos de sus objetivos más preciados y, por supuesto, no han sufrido castigo por parte de la Generalitat, que no les han desterrado de los medios públicos.